¿Cómo Amamos?

Quizás esta pregunta nos ha rondado el pensamiento en innumerables ocasiones, cuando hemos iniciado una relación o cuando hemos tirado la toalla, ante una discusión o ante la felicidad plena del enamoramiento…Lo cierto es que el amor es compañero de viaje en el camino que nos ha tocado vivir, pues todos hemos amado en alguna ocasión aunque sólo haya sido a nosotros mismos.

El amor se desarrolla bajo sus tres grandes elementos básicos, los cuáles son: a) Pasión o vivencia de atracción física muy intensa; b) Intimidad o vínculo comunicativo y afectivo estrecho (confianza, comunicación, comprensión, apoyo emocional); y c) Compromiso o deseo de estar con el otro y decisión de desarrollar y mantener esa relación.

La combinación de estos tres componentes en distintos grados, dan lugar a los diferentes tipos de amor que las personas manifestamos. Algunos de ellos son:

-          Amor romántico: pasión e intimidad
-          Amor fatuo: pasión y compromiso
-          Amor compañero: compromiso e intimidad
-          Amor vacío: sólo compromiso
-          Amor pasajero: únicamente pasión
-          El gustar consistente únicamente en la intimidad
-          Amor completo: incluye los tres elementos, compromiso, intimidad y pasión

Además de estos tipos, caben tantas formas de amor como personas que aman, ya que es posible casi infinitas combinaciones. Incluso una misma persona puede y suele amar de distintas formas a lo largo de su vida, priorizando, modificando o descartando algunos de los elementos del amor. La edad hace que se vayan modificando las creencias, las actitudes, los valores, los intereses, las motivaciones, las preferencias, etc., pero eso no debe asustarnos.

Lo realmente importante es aceptar que nuestra forma de amar puede ir cambiando y saber adaptarnos a ello. Aquellos que tengan pareja deben emplear la comunicación (tan importante en todas las relaciones humanas) como vehículo de conocimiento entre ambos, para hablar sin tapujos de las necesidades en cada momento de la vida; así se evitarán frustraciones.

Lo ideal es que ambos coincidan en el tipo de amor que van necesitando para recibir lo mismo que se espera, para que la balanza de la oferta-demanda esté equilibrada y la relación fluya en un ambiente de positividad y vigor.

No olvidéis que el mundo necesita de corazones valientes y verdaderos que nos inunden a todos de amor, pues como decía un gran filósofo “el amor es la fuerza del mundo”.